A la tarde nos juntamos por tercera vez en el mes (un récord) con mis amigas. Fuimos a la casa de Veri que esta a dos pasos y medio de tener a Joaquin. Es impresionante lo grande que esta su panza y a su vez (aunque ella se queje de sus kilos de más) lo flaca que esta. Veri es de esas mujeres que automáticamente después de tener al bebe recupera su figura… una envidia.
Yo estoy así como ya sabrán… entre cansada y super ida. Y si además adicionamos a la reunión la torta brownie que prepara Vero con dulce de leche, nueces, chocolate… Io paso a un segundo plano detrás del plato de torta.
Las chicas estan como siempre. Y, en estos días, es lo que más me gusta. Ale esta super feliz con su pancita nueva, Vic con su nuevo trabajo de mamá, Marce con su clásica locura y Veri con su panza y la gorda más “femenina” que nunca con sus casi dos años.
Igual ya nos estamos preparando para este jueves, con nuestra tan esperada salida la “Noche de los Tequila” (en honor a aquella salida en la que todas tomamos dicha bebida con efectos muy dispares entre todas nosotras –algunas de las cuales ni siquiera podían bajar las escaleras… y no recuerdo nada de un intento de asesinato, asi que no pregunten-)
Cuando llegue a casa, la Diablurita me llamó porque habiamos quedado en salir. Como ella es una futura desempleada de una importante multinacional y yo estoy más complicada que nunca con el efectivo; se nos ocurrió canjear los puntos de mi tarjeta por unas entradas al cine.
Asi que me cambié y la pase a buscar para ir al Village Recoleta.
Llegamos, cambiamos los puntos, hicimos la cola del cine para buscar las entradas. Y que vemos?
Yo quería ver “El Ilusionista” pero se la tengo prometida a Ale. Se me ocurrió “El Gran Truco” pero las entradas estaban agotadas.
“Un Buen Año” dijo la Diablurita. Mmmmmmmmmmmhhhhhhhh!!! Russell Crowe… tengo mis dudas. (Por suerte) las ultimas localidades eran para asientos en fila tres… paso.
La diviiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiina de la cajera nos recomendó una de suspenso… “Están entre nosotros”. Io, al grito de “las de terror no me gustan… yo no quiero, no por favor… cual otra? Cual otra??????????” me terminaron convenciendo que no era de terror y no había sangre.
De pasada por las carteleras, en la que correspondía a esta película se podía leer bien clarito la palabra “terror”… igual la Diablurita seguia convenciendome que era de suspenso nomás.
Subimos al tercer piso, compramos los obligados popcorn y las gaseosas y esperamos a la hora de comienzo poniendonos al día sobre nuestras cosas.
Lo bueno de este cine (algo bueno tiene que tener) es que las entradas son numeradas; o sea… olvidate de hacer colas larguisimas media hora antes del comienzo, empujones y codazos, discusiones de “estaba yo adelante” o “no te coles querido, eh!”
Entramos diez minutos antes del comienzo de los trailers. Será que ninguna de los trailers fue muy emocionante, porque no recuerdo ninguno.
Empieza la película.
Sensaciones: Mmmmhhhh… que floja que estuve, me olvide un saquito porque el aire acondicionado me esta matando.
Porque será que los títulos están en otro idioma ??? No será esta una película japonesa, no ??? No será del estilo de “La Llamada”, “El Grito”, etc no ???
Parece que ninguna empresa de calzado puso plata porque se la pasan descalzos.
Cuanto falta para que termine ???
Porque el boludo de atrás hace ruido con el pochocho ???
Porque el boludo de atrás aprovecha cuando la pantalla se pone negra y no hay sonidos para hacer ruido justo detrás de mi ???
Que ganó la cajera con decirme que no había sangre en la película si la había… vi sangre… lo juro!
Me venia controlando bastante bien. Ahogaba mis gritos y de los nervios me devoraba el pochoclo. Hasta que en un momento en la película se escucha un alarido y fue imposible contenerse. Grité! Y la Diablurita también. Y después de eso ya no me inhibi más. Me grité todo.
Ven... da miedo. Que esa cosa te saque la frazada mientras dormis... Cuando tengo razón, tengo razón!
Después le agarre la mano… cuando la música se ponía “misteriosa” me tapaba la cara y listo.
Al final tuvo un toque de gracia. No se los cuento para que no se quejen que les cuento el final de la historia.
La Diablurita todavía esta intentando hacerse la valiente pero recuerdo muy claramente que me decia “dame la mano, dame la mano”, tenía la piel de gallina y me dijo “dale, quedate a dormir en casa”
Como veniamos medio alteradas con la película, decidimos ir a tomar unos drinks. Fuimos a Green Bamboo en Palermo, un resto bar vietnamita donde hacen unos tragos barbaros.
Era tarde pero había lugar en la barra. Nos sentamos y pedimos unos tragos.
El barman y el mesero (los cuales estaban muy bien) nos invitaron a tomar algo después pero no fuimos. Todavía no se la razón.
No pregunten… no se.
Asi que terminamos la noche, dos mujeres solas en un departamento, un poco alcoholizadas y con un poco de miedo.
Y me tomó todo el domingo recuperarme de esa salida. Reitero: me estoy volviendo vieja.
3 agarraron el lápiz:
Loca, es evidente que vos tenes un problema con las pelis-de-terror que no querias que fueran pelis-de-terror, y que igual entras a verlas, te asustas como nunca, y despues prometes no volver a verlas!!! jajaja! Me hiciste acordar a la que vimos nosotras... Como se llamaba?
Join the club.
dpmdhdr
Anuska: Fuimos a ver La Profecia. Te juro que me acorde de nuestra salida toooooda la noche.
Igual esta era muuuuucho peor. Te lo aseguro.
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