Rugby ...

Siempre me gustó mucho más el rugby que el fútbol.

Será porque pasé muchos años en el club donde mi hermano jugaba acompañandolo, junto con mi papá y mi mamá.

Aunque a veces me aburría pasar los domingos en un club al aire libre, lleno de gente que no conocía, en el fondo me hubiese gustado practicar un deporte como ese. Donde se matan en la cancha y después comparten un asado con las familias.

Conozco un poco más de rugby que de fútbol, y si alguna vez tengo un hijo seguro que jugará al rugby.

Ya de más grande me fue imposible pasar por alto a los rugbiers.

No hay nada que me pueda más que un rugbier... (los músicos vienen en una categoría inferior).

Mi "crush" más importante en el secundario fue con un rugbier. Yo estaba en tercer año y él en quinto cuando pasó algo. Estuve meses detrás de él (con mi disimulo característico, o sea... imaginense: nunca se dió cuenta)

Varios años después conocí a mi ex, y sin que él me lo dijera yo ya lo sabía: él jugaba al rugby. (Ya les conté que Agustín Pichot es muuuuy parecido)

Mi chico por estos días también fue rugbier.

Los rugbiers tienen un cuerpo especial, eso nadie lo puede negar.

Hasta algunos dicen que sus personalidades son distintas a las de jugadores de otros deportes.

A veces me da risa porque podés darte cuenta por como se visten.

Pero esos son estereotipos.

Me pierden las espaldas de los rugbiers. Hay que admitir que tienen buena parte trasera, pero las espaldas ... aaahhh, sin palabras.

Y por si no me creen, miren a este Puma...

Esta es mi sección de deportes.